por Gerardo Gómez Muñoz
Mientras su jefe político Mauricio Macri no deja de perder puntos en las mediciones sobre la imagen propia y la de su gobierno, María Eugenia Vidal no ceja de crecer. Su muñeca política talló muy alto en reciente charla política con los popes del radicalismo provincial, como se leerá a continuación y en la visita del intendente Carlos Arroyo, vinculada estrictamente a la gestión municipal.
Venía preocupándole la próxima contienda radical y no se quedó con el entripado, apenas los tuvo enfrente en estos días a los tres titulares de las presuntas listas que iban a presentarse en las elecciones del internas del 23 de octubre, les hizo saber su opinión. Pudo haberles dicho a Ricardo Alfonsín, Maxi Abad y a Daniel Salvador “muchachos, por favor, dejen de jorobar, una interna ni los favorece a ustedes ni a nuestro gobierno a no ser que gane Salvador porque mi vice gobernador no puede perder”. Parece que ni les habló del escaso sustento legal y formal que tendría la elección del radicalismo que aún no solucionó el problema que motivó a judicialización de los últimos comicios por las graves falencias denunciadas en los padrones. Dicen sotto voce que ellas no fueron solucionadas sino que aumentaron. Ahora habría algún intendente y hasta concejales que no estarían afiliados, por ejemplo y otros miles de seguidores tampoco figurarían registrados.
En definitiva, la interpelación de la gobernadora les hizo muy bien a los orondos radicales que ya presumían de candidatos, pero que, en el fuero interno sabían que las ganas de contender iban a rendirse al primer amago de arreglo. Vaya a saber -menos pregunta Dios y perdona- si no fue que allí mismo coincidieron en que un mal arreglo sería mejor que un sonoro papelón .Y allí, consecuentemente, habría sido, casi natural, un preacuerdo con la base de Daniel Salvador presidente -que no podía perder porque es el vice gobernador como les previno María Eugenia-, Carlos Fernández, por Alfonsín vicepresidente y Maxi Abad, por Ernesto Sanz, secretario general. Otra negociación que podría resultar más peleada es la de los cuatro delegados al comité nacional de la UCR.
Pero la cuestión tal vez se sellaría sólo después de que la hábil mandataria también se muestre un poco más generosa con los jefes aliados, cuya tropa demanda cada vez más impaciente “participación” como le dicen ahora a la “ubicación” en lugares interesantes que premien “el sacrificio”.
¿Y el comité local?
Bueno, eso será otro cantar, porque el comité tan inocuo ahora, súbitamente, puede volver a transformarse en el sitio del debate y de la resolución final, no de los principios y de la doctrina histórica, sino de la pelea por los apetecidos, especialmente los rentados en el Estado por encima de los simplemente partidarios. Y en ese sentido ya se registran indicios de lo que puede ser una guerra sin cuartel en procura del lápiz marcador.
Apenas sabido lo del acuerdo pedido por Vidal al radicalismo provincial, alguien que, por lo menos, no disimula su apetito dijo yo “quiero”. El viernes reunió a una cincuentena de sus seguidores en el local de la calle San Martín para autoproclamarse precandidato a presidente del comité, es decir que esto puede significar que en Mar del Plata se vote.
La cuestión central -“las patéticas miserabilidades”, diría don Hipólito-, son las cuatro bancas que se deben renovar en el Concejo: Eduardo Abud, Cristina Coria, Nicolás Maiorano y Vilma Baragiola sobre un total de 12 que cesan. Más fácil era en tiempos en que la Carta Orgánica de la UCR ponía serias condiciones para la reelección ahora, ¡qué va!, todos van por la primera o segunda.
Otra cuestioncilla es que Mario Rodríguez de acuerdo a su hígado suele aparecer como un cara pintada contra el gobierno de Arroyo y desde arriba hay quienes amagan con la lista propia y no compartida en “Cambiemos”.
Y hablando de manejar lápices ¿qué pasaría si Maxi Abad presenta lista propia al comité? La demostración en River fue muy amplia y contenedora de muy diversos sectores del radicalismo. Ahí prometen jugar VARA, Franja Morada, Organización de Trabajadores Radicales y también Tato Serebrinsky que mantiene unos cientos de fieles seguidores… No fue casual que Maxi saludara su presencia desde el escenario. Y cuyo andar no deja de sorprender como el viernes cuando motivó que muchas cabezas giraran sorprendidas y algunos ojos casi estallaran cuando lo vieron entrar al despacho principal invitado por la ministra Patricia Bullrich. Y hay quienes aseguran haber oído en la despedida un casi imperativo “Tato, vení a verme en Buenos Aires”… Y apareció en las fotos, en las tomas de la televisión, un logro que a Vilma le demanda codazos y empujones a granel, con las consabidas risitas sardónicas de los adversarios como tal vez las del inefable Tato…
Y los consejos para Arroyo
El lunes de la semana anterior, el intendente y sus colaboradores inmediatos volvían de La Plata, muy optimistas tras los 40 minutos, a solas, que la gobernadora le había concedido al jefe comunal. La sugerencia central había sido que urgían algunas medidas que constituyeran “una señal” de que se realizaban esfuerzos extraordinarios para merecer una ayuda extraordinaria para sacar lo más pronto posible del ahogo irremediable de la administración marplatense.
Todo ante la comprobación de la pérdida de tiempo del impresentable José Cano que hizo creer a su mandante que todo se solucionaba con acusar y condenar a Gustavo Pulti.
El jueves Arroyo nuevamente era aguardado en el despacho principal de La Plata, pero llegó el aviso del intendente de que no podía viajar, porque dos viajes seguidos lo agotaban. Esperó en vano Gustavo Schroeder porque el secretario Mauricio Loria arrastraba un marcado retraso debido al inoportuno reventón de un neumático en la autovía.
A todo el ministro Lacunsa -radical él- exhibía y hacía notar a quien sea que su “chinche” desbordaba. Lo peor fue después cuando comprobó que “las señales”, modosamente pedidas por María Eugenia, estaban “en veremos”. Descuento de los salarios de los sobrevalorados funcionarios políticos, jubilación de unos 300 agentes en condiciones de retirarse, solicitud de préstamo al tesoro y una tasa de excepción por la crisis. Dicho sea de paso que Cano, además de su generosidad en cuanto al reclamo salarial de los municipales al tratar la paritaria, había elaborado una escala de reajuste de las cargas impositivas que ni él entendió a no ser que haya sido adrede para perjudicar al erario.
Un agregado que infló todavía más el ánimo oficial fue que todo está en armado y sin fecha aún para el tratamiento de estas serias cuestiones en el Concejo Deliberante.
Otro detallito es que hay referencias sobre las tareas de desgaste ante funcionarios provinciales habría estado realizando un reactivado y dolido Agustín Cinto, el “pibe de oro”. Pero hoy está todo claro, la gobernadora ya aconsejó qué se debe hacer, porque con un ATN por mes la gestión no marchará y el conflicto con los municipales, está anunciado, será respaldado por los gremios del ramo en la provincia.
El sueño de José Ibáñez
No hay que ser muy veterano ni excesivamente memorioso para recordar cómo luchó José Ibañez, hermano de Diego, para que se respetara la identidad del Puerto de Mar del Plata. Siguiendo esas huellas el ex concejal Daniel Sosa se ha encontrado con un centenar de hombres y mujeres que con él descubrieron que aquel sentimiento perdura y no se ha alterado, sigue siendo no un resentimiento sino una respetable aspiración. Desde el novel partido vecinal “Mar del Plata Puerto y Región”, a partir de la búsqueda de lemas para la promoción estampó en su Facebook una interrogación convocante “Yo amo al puerto y usted? La respuesta lograda en sólo 72 horas recogió más de 37 mil “me gusta”. Esta simple constatación motivó que en las últimas semanas, ese mencionado centenar de entusiastas creadores del “MPR”, saliera a apurar afiliaciones, ya están cerca de las miles requeridas para legalizar el partido. Consecuentemente el grupo consiguió los pintores que salieron a disputarle los muros de las avenidas a Lucas Fiorini con pinturas del color del portuense Aldosivi.
En tren de aportes significativos, Daniel Sosa subraya que el Puerto mueve con toda su área de influencia desde Juan B Justo al sur más de la mitad del trabajo y de la economía de Mar del Plata “solo fue considerado en el Concejo Deliberante con tres concejales desde la restauración de la democracia en 1983 que fueron Jorge Yácono, yo mismo Daniel Sosa y Ricardo Alonso”. Por último Sosa reconoce que este entusiasmo está también impulsado “por una significativa afluencia de militantes y referentes de actuación de diversos partidos que residen en los barrios del área portuense que se nos están acercando para sumarse”.
Moreau crece en la 5ª
El principal referente en Mar del Plata del Movimiento Nacional Alfonsinista que lidera Leopoldo Moreau es el dirigente casinero Roberto -Chucho- Páez ex concejal del frente que llevó a la primera intendencia del efímero frente radical. Su labor no se agota en este distrito sino que se extiende por toda la 5ª Sección y en esta tesitura este fin de semana acompañó al jefe partidario a acto de constitución del MNA-Forja en Necochea, Miramar y Balcarce en actos públicos que en cada uno reunieron a centenares de personas. En la primera ciudad Moreau y Páez estuvieron acompañados en el palco por los dirigentes locales que comandarán las fuerzas alfonsinistas en ese distrito, Flavio Ibarguen y Fernando Hansen. En Miramar conducirá MNA-Forja, Osvaldo Storani que durante 8 años fue concejal de la UCR, Graciela Franco ex funcionaria de Marcelo Honores y Luis Salvini mientras que en Balcarce lo harán Patricia Alías y el dirigente de Suteba Juan Pablo Poblet.
“Radicales hacerse cargo”
“Es una señal que no alcanza”, minimizó el jefe del bloque del Frente Renovador Lucas Fiorini en referencia al anuncio de Arroyo sobre un descuento del 10 por ciento del sueldo de los funcionarios políticos “porque antes llenó su gobierno de esos nombramientos”. Agregó que, en realidad “la UCR debe dejar de hacerse la distraída y de pelear por nuevos puestos y hacerse cargo con el PRO y Agrupación Atlántica de este vacío de gestión”. Destacó Fiorini que al FR “no se le puede pedir más porque hemos apoyado el presupuesto y la emergencia económica y todo lo que fue necesario para el sostén institucional del gobierno de Cambiemos”.
Por otra parte Fiorini ascompañó, este fin de semana, a Malena Galmarini en la vista a Tandil para respaldar al diputado Dalesandro, titular del massismo en la ciudad serrana y de paso comenzar su propia instalación en diversos distritos de la 5ª Sección.